La víctima de abusos sexuales del hospital de Guadalajara: «Ninguna autoridad se ha interesado por mí»
La víctima de abusos sexuales por parte de un celador del Hospital Universitario de Guadalajara ha concedido una entrevista en exclusiva a OKDIARIO donde asegura que, además de que todas las autoridades le han dado la espalda, se han tapado pruebas que podían haber sido determinantes. «Imagínate estar en una institución donde te tienen que curar y tras los abusos sexuales se ponen en tu contra y además ocultan las únicas pruebas que tienen», así comienza la entrevista la joven.
Los hechos ocurrieron el pasado 23 de julio de 2020. La joven tenía en ese momento 18 años y era paciente de larga estancia. Llevaba casi mes y medio ingresada por un trastorno de conducta alimentaria en una planta donde era de difícil acceso ya que estaba cerrada con llave. «Mi día a día era muy triste, vivía aislada de mi familia, por las mañanas tenía consulta, comida, visitas cuando me dejaban y a dormir. Y así eran todos los días», comentaba la víctima. A la soledad que hace referencia la joven, se sumó el miedo «el celador sólo subió a mi planta una vez y te aseguro que fue suficiente», detalla la joven bajando la mirada al ser preguntada.
Dos días después del ataque sexual, decide contar lo sucedido a una auxiliar,-con la que la joven tenía confianza,- y ésta lo traslada a la psiquiatra. No sólo lo sabía esta profesional si no toda la planta de psiquiatría, incluso, la dirección de la misma. «La psiquiatra que estaba de guardia me dijo que era decisión mía denunciar o no. Me dejó claro que si no lo hacía ellos iban a guardar el secreto», recalca la chica indignada con el papel que tuvieron los profesionales del centro en ese momento.
Es tanta la falta de ayuda activa hacia la joven que incluso resultó relevante a los magistrados que juzgaron el caso. Como ya adelantamos en OKDIARIO, la sentencia lo dejaba claro. «No se acredita que se le hubiera propuesto en firme un posible traslado de hospital», afirman los magistrados, que añaden esa coletilla pese a que se trata de un dato que en nada influye en la condena. A ello, añade la víctima que «en lugar de cambiarme de centro, me amenazaron con que si no cogía peso me llevarían al Centro de trastornos de conducta alimentaria de Ciudad Real. Pero era más una amenaza que una ayuda», subraya.
El caso salpica de lleno al PSOE, no solo por la actitud reiterada que mantuvo el Gobierno de Page en este caso de abusos sexuales sino porque, además, afecta de lleno a un diputado socialista en el Congreso, Aurelio Zapata, que cuando ocurrieron esos abusos sexuales era el director de gestión de ese hospital público. La familia de la chica, el mismo día de la entrevista, contó que tal era el descaro de la Junta de comunidades y del SESCAM, que en el juicio, la víctima parecía la culpable. Fueron ellos los que cuando se enteraron de los gravísimos hechos, hablaron con el entonces director de gestión (Aurelio Zapata), por lo que tuvo conocimiento directo de lo ocurrido. Según la víctima y su familia, no actuó contra el celador y silenció los hechos.
Literalmente lo que Zapata argumentó cuando la víctima pidió el visionado del contenido de las cámaras del hospital fue que «eran cámaras de vigilancia y no de grabación y la única medida que podía tomar en ese momento es que el celador no volviese a esa planta». Estas medidas que se tomaron por parte del centro médico sirvieron de tan poco que «al día siguiente de lo sucedido, me lo encontré en el ascensor», cuenta la joven sin dar crédito a lo ocurrido.
Por si eso fuera poco, en el momento del juicio, al celador se le impuso una orden de alejamiento de 500 metros y, aún así, este abusador, seguía trabajando en el mismo centro. Con un contrato temporal,-por la situación del coronavirus-, que se le renovó varías veces.
Tres años después de lo ocurrido, ni el gobierno de Castilla-La Mancha, ni la Consejería de Sanidad y, mucho menos, la de Igualdad, se han preocupado por ella «ni se han puesto en contacto, ni se han pronunciado, ni han dado explicaciones de nada», asegura la joven. Como ya adelantamos en este periódico, el diputado nacional del PSOE por Guadalajara, Aurelio Zapata, se ha blindado en su escaño del Congreso para, protegido por su partido, no dar explicaciones públicas ante el escabroso caso de abusos sexuales que sufrió la joven en el hospital de la capital alcarreña cuando él era su gerente. Podemos y el Ministerio de Igualdad también callan. Zapata, apuntado por haber encubierto el caso en vez de denunciarlo en cuanto lo conoció, se ha negado a contestar la batería de preguntas que le ha lanzado OKDIARIO. Este periódico ha sido incapaz de obtener respuestas, ante la barrera de contención que ha levantado el servicio de prensa del PSOE en el Congreso para cerrar el paso y mantener en silencio al parlamentario.
Aquí la entrevista completa.